El corazón verde de Italia se llama Umbría, una tierra de bosques y tesoros por descubrir. Allí, en la localidad de Unicnano - Spoleto, Claudio Campanella y sus hijos Franceso y Antonella hacen vinos que, sustentados en la larga tradición vitivinícola umbra, hablan de la tierra, el trabajo en familia y la imaginación.
A los pies de las montañas Martanas, los Campanella cultivan las variedades insignia de su territorio. Las uvas tintas Sagrantino y Sangiovese y las uvas blancas Grechetto y Trebbiano Spoletino, junto con un par de variedades internacionales forman el fantástico repertorio del que nacen vinos que perduran en el tiempo.